Supongo que a vosotros os hace ilusión leer nuestras cosas; del mismo modo, a nosotros nos gustaría saber de vosotros, así que os agradeceríamos que dejárais algún comentario, que Inma es muy cotilla!!

jueves, 15 de noviembre de 2012

Todo lo que empieza acaba (aunque sea antes de tiempo)

La verdad es que siento no escribir más a menudo, pero es algo que no me sale. Tengo que estar animado ya que escribir es algo que nunca ha sido lo mío y he de decir que no he estado todo lo animado que debería estar. En una de las entradas anteriores ya os decía que esto no era exactamente lo que me esperaba y que esperaba que la cosa fuera cambiando con el tiempo. La verdad es que me considero bastante paciente (al menos para algunas cosas) y aquí creo que lo he sido. Como dije en otra de las entradas, me vine aquí con la cosa de que "me iba a involucrar en el departamento", frase que también me repitieron el primer día cuando llegué y que el resto de la gente del departamento lo decía (creo) porque se lo creían. La verdad es que después de casi seis meses que llevo aquí me he sentido realmente involucrado tres días. Pero no tres días como expresión de que han sido pocos días, sino realmente tres días: Uno, dos y tres.
Aparte de todo esto, en esta época he visto cómo he sido desplazado de cirugías en las que inicialmente estaba asignado para que ocupara mi lugar algún residente de aquí (que no estaba asignado) o incluso algún otro visitante (aquí nos llaman fellows, pero somos visitantes).
También es cierto que no le he pillado el punto al carácter de la gente ya que hay algunos días (los menos) que son super simpáticos y hay otros que te miran, te vuelven a mirar y ya. Lo curioso es que después, fuera del hospital, son muy simpáticos. Es como si tuvieran dos modos. Me recuerda a la típica gracieta en la que uno está serio, se pasa la mano por la cara y dependiendo de la dirección de la mano, sonríe o hace un puchero. Modo trabajo: Puchero - Modo fiesta: Sonrisa. En esos momentos echo mucho de menos los quirófanos de España (tanto Sevilla como Madrid, Santander o Barcelona) y ese ambiente en general distendido pero que cuando tocaba ponerse serio, te ponías serio.
Por todo esto, he hablado con el Profesor y le he dicho que en diciembre me vuelvo para España. Ha intentado convencerme ofreciéndome alguna cosilla de investigación pero creo que no me merece la pena; aunque me la mereciera, pienso que me lo podría haber ofrecido cuando llegué y no haberme hecho perder cinco meses. Rectifico esta frase porque no han sido cinco meses perdidos, ni mucho menos. He aprendido muchísimas cosas que querré hacer en el futuro; muchas que no querré hacer; he visto que no es oro todo lo que reluce, que problemas hay en todos lados y que algunas cosas que se hacen aquí, pienso que en los sitios donde he estado se hacen mejor.
Por otro lado, no puedo evitar compararme con mi co-R, esa chica que tiene el blog inundado de posts y que se encuentra en México trabajando, realmente involucrada y con un ritmo de trabajo altísimo. Comparo con lo mío y no tiene nada que ver, por lo que me parece aún más, que no me merece la pena estar aquí.
También me acuerdo de los fellows que están aquí en Gante pero rotando en otro hospital con dos cirujanos estéticos de renombre a nivel mundial. Cuando ellos me cuentan cómo les tratan (aunque en el quirófano es un comportamiento parecido), me da envidia. A ellos les recomiendan restaurantes o clases de yoga y el cirujano durante el fin de semana les escribe un mail preguntándoles que qué tal les ha ido, que si les gustó; en definitiva: se preocupan por ellos, y esa es una sensación que yo aquí apenas he tenido.
Como resumen y valoración global de este sitio, pienso que es un buen lugar para venir un par de meses a rotar, a ver cómo trabajan y a conocer algo distinto. Para venir un año aquí rotundamente NO LO RECOMIENDO.

Por último, me gustaría agradecer a Jara, mi novia, el apoyo recibido durante estos momentos. He sentido el calor de sus ánimos cuando lo he necesitado y aunque ella a veces no haya notado que esos ánimos eran efectivos, sí lo han sido.

P.D.: Ahora voy a empezar a buscar trabajo en Madrid, así que si sabéis de algo o conocéis a alguien (aunque la situación está complicada), avisadme, que estará bien tener cualquier información.

5 comentarios:

  1. Fer, ya sabes que estoy aquí para lo que toque,... y ahora toca cargar pilas para una nueva etapa llena de incertidumbres a la ibérica, aunque al menos cerca de los tuyos (por supuesto, yo me incluyo la primera entre "los tuyos").

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  2. Vaya Lobo, lamento que no hayas podido aprovechar como querías todo este tiempo, lo que te hubiera gustado. Como dices, no has perdido el tiempo, y debes quedarte con lo que hayas aprendido, tanto bueno, como menos bueno. Te envío un gran abrazo desde Gerona (si coincide y ando por aquí, ahora curro días sueltos y bajas en el hospital, pásate en el viaje de vuelta, si no, nos vemos por Zamora en navidades o cuando surja) y muchos ánimos para la próxima etapa.

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  3. Siento que haya sido así, y recuerda que entre las dificultades se encuentra siempre la oportunidad. Si lo dijo Einstein... los madri-zamoranos te esperaremos con los brazos abiertos. Un beso.

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  4. Vuelve lobito!! Que los malos tiempos y las crisis sacan lo mejor de los emprendedores y tú lo eres, así que veras como inicias una nueva etapa más gratificante. Un besazo!! y ya sabes que los que seguimos al amparo de la mismisima Virgen del Rocío estamos deseando volver a verte:). Puri

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  5. Joder. Mira que cuando estuve allí te noté bastante desanimado, pero según contabas, las cosas iban mejorando poco a poco. Creo que debí de coincidir en esos tres días de los que hablas :(

    Al final, por muy bien que hagas las cosas, no todo depende del esfuerzo, la ilusión o los huevos que se le eche a algo. También hay que contar con el factor circunstancial. Has tenido la mala fortuna de coincidir con un equipo cerrado en banda, pero por desgracia, no es algo que puedas controlar.

    Sólo espero que la mala experiencia no te influya en el futuro para evitar dar pasos como el que diste hace cinco meses. ¡Quien no arriesga no gana!
    Un abrazo muy fuerte, Fer. Cuando vuelvas nos tomamos unas birras a tu salud. Que además he localizado un sitio donde venden Rochefort ;)

    Y recuerda: siempre hay dinero en el puesto de plátanos.

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